El Vicepresidente Ejecutivo del proyecto explicó el impacto que tendrá la iniciativa, así como las ventajas comparativas respecto de otras fuentes energéticas.
El ejecutivo informó que el proyecto, que incluye la construcción de cinco centrales en los ríos Baker y Pascua, está dentro de las fases finales de la evaluación ambiental, con la entrega de las respuestas a las 199 observaciones realizadas por los servicios públicos a la empresa (plazo vence el 15 de abril próximo).
Indicó que, si las respuestas son consideradas satisfactorias, sería posible obtener durante el mes de mayo la calificación ambiental de las centrales.
En tanto, precisó, que se avanza paralelamente en la preparación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la línea de transmisión, el cual sería entregado al sistema de evaluación hacia fines de este año.
Daniel Fernández alertó que la decisión de inversión por parte de los dueños se va a tomar en la medida que haya aprobación ambiental. “Una vez que se tenga y se hagan todos los estudios de ingeniería y se vea el costo global, se tomará la decisión. Para eso faltan algunos años todavía”, acotó.
El Presidente de la Comisión, diputado Alejandro García-Huidobro (UDI), dijo que es importante abrir un debate en el Parlamento y que a través de los medios de comunicación de la Cámara, el país pueda informarse sobre el tema. Anticipó que se van a analizar los antecedentes que ha traído la empresa, pero que también se invitará a quienes se oponen al proyecto. “Es importante escuchar todas las partes y analizar esto con alturas de miras y de conveniencia nacional”, enfatizó.
El legislador destacó que la empresa haya ido perfeccionado el diseño original, que contemplaba 30 mil hectáreas de inundación, para llegar a un proyecto que considera hoy 5.910 hectáreas inundables, esto es, el 0,05% de la región. También resaltó que, una vez operando las cinco centrales, se tendrá una capacidad instalada de 2750 MW y una energía media anual de 18.430 GWh, lo que sería un apoyo significativo a la matriz energética del país.
García-Huidobro lamentó que en Chile sigan aumentando las fuentes energéticas basadas en el carbón, en vez de avanzar hacia energías limpias. En este plano, anunció que la Comisión contempla organizar para los primeros días de mayo un seminario de energías renovables no convencionales, donde se analizarán temas como avances, costos actuales y legislación relacionada con estas fuentes.
Presentación
Según indicó Daniel Fernández en su presentación, los países desarrollados han realizado históricamente un esfuerzo para explotar la fuente hidráulica para desarrollar energía (Europa ha desarrollado el 75% de sus recursos hidráulicos; Norteamérica el 69% y Australia el 70%), en tanto que en Latinoamérica apenas ha desarrollado el 33% de su potencial (destaca en este plano el rol de Brasil, 79%, mientras que Chile sólo llega al 19%).
Señaló que, según datos de Comisión Nacional de Energía, (CNE), se proyecta una tasa de crecimiento del consumo de energía del Sistema Interconectado Central (SIC) para el periodo 2008-2020 de entre 1.4% y 9.1% anual. Ello implicaría, acotó, aumentar la capacidad del orden de 500 MW/año.
Agregó que, un estudio realizado por la Universidad de Chile señala que en los próximos 20 años la demanda energética del SIC pasará de los 6.000 MW actuales a cerca de 18.000 MW.
Explicó que los 2750 MW de potencia instalada que tendrá el conjunto de centrales equivalen a siete centrales de carbón de tamaño promedio. Ello evitaría la emisión de 16 millones de toneladas de CO2, esto es, aproximadamente las emisiones de todo el parque automotriz de Chile
Fernández reconoció que, como toda iniciativa, el proyecto completo, es decir, las cinco centrales y la línea de transmisión de corriente continua que se extenderá desde Cochrane a Santiago, ocasionarán impactos, pero sostuvo que se ha buscado minimizar los efectos al máximo posible, siendo algunas de las premisas mantener la fluctuación en los lagos Bertrand y O'Higgins y las características del salto del río Nef sobre el Baker; y una fluctuación máxima de los embalses de dos metros.
Indicó, además, que conjuntamente con otras medidas compensatorias para la comunidad y la región, se emprenderán obras de infraestructura (puertos, caminos, relleno sanitario, abastecimiento eléctrico) que permanecerán para beneficio de la zona.
Cabe señalar que la Comisión acordó continuar analizando este tema la próxima semana, para dar tiempo a los legisladores de hacer preguntas y al ejecutivo de responderlas.
Cuestionamientos
La mayoría de los diputados de la comisión de Minería y Energía, rechazó las declaraciones del vicepresidente ejecutivo de HidroAysén, Daniel Fernández, en el sentido de la línea de transmisión necesaria para llevar la electricidad generada en Cochrane hasta Santiago.
A pesar de que Fernández fue enfático en explicar que la altura de las 6000 torres de alta tensión sería 40 a 60 metros de altura, disminuyendo el impacto visual, y que el trazado a construir por nueve regiones de Chile, no superaría los 2.000 kilómetros de largo, el diputado Alfonso de Urresti, presente en la sala, expresó su rechazo al paso de la línea por la región De los Ríos, a la cual representa.
El parlamentario también se refirió a la capacitación y becas de estudio que la empresa ha entregado en Aysén, indicando que las deficiencias históricas del Estado con las regiones australes, no deben ser asumidas por una empresa privada.
También presenciaron la presentación los diputados por la Región de Aysén, David Sandoval y René Alinco, éste último quien consultó por el impacto en la región dando como ejemplo lo sucedido con empresas salmoneras y mineras que sólo han entregado empleo barato y gran contaminación en la zona.
“Todo tiene un costo, nosotros queremos que sea el mínimo posible (…) Hoy día la gente de Aysén necesita trabajo y un buen sistema de salud”, dijo.
Por su parte, el diputado David Sandoval aclaró que “aquí hay una empresa que está instalando un proyecto que no le resuelve ningún problema a la Región de Aysén, sino está pensado en resolver el problema energético del país”.
Asimismo, se mostró interesado en que la ciudadanía local exprese su aprobación o rechazo a las represas antes que se tome una determinación definitiva.
La sesión se extendió por más de dos horas y, tal como lo dijera el presidente de la comisión, Alejandro García Huidobro, ésta evidencio lo necesario de debatir sobre los impactos y conveniencia de un emprendimiento tan controvertido para Chile como HidroAysén.
En tanto, debido a las numerosas consultas y cuestionamientos de los diputados, Daniel Fernández no tuvo tiempo para responder, por lo que quedó citado para continuar la sesión el próximo miércoles a las 15:30 horas en el Congreso en Valparaíso.
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