Desde el miércoles 18 de mayo y hasta lograr las 5 mil firmas, ciudadanos y ciudadanas de Iquique iniciaron un proceso de recolección de signaturas. Con las firmas reunidas se podría auto-convocar un plebiscito para impedir la construcción de las termoeléctricas de Pacífico y Patache, centrales recién aprobadas por la Comisión de Evaluación Ambiental del Gobierno.
Ciudadanos defensores del medioambiente y agrupados en elCodemat (Comité de Defensa de la Madre Tierra) iniciaron el miércoles pasado un proceso de recolección de firmas para auto-convocar un plebiscito.
Como lo establece la Ley de Participación de la Ciudadanía, recolectando cinco mil firmas los ciudadanos pueden convocar a un plebiscito municipal, cuyo resultado será vinculante para el municipio si vota el 50% más uno de los electores inscritos en los registros electorales de la comuna.
Con este plebiscito pretenden impedir la instalación las termoeléctricas a carbón de Patache y Pacifico. Ayer, y tras una hora del inicio de la recolección, más de cien personas habían firmado, entre otros el diputado Hugo Gutiérrez, los concejales municipales Guillermo Cejas, Arsenio Lozano, y María Inés Macchiavello, así como representantes de la CUT (Central Unitaria de Trabajadores), funcionarios de la salud, de Gendarmería, empleados fiscales, de profesores, estudiantes, entre otros.
Después de la marcha del 13 de mayo, en la cual una columna de unas cuatro mil personas expresó su rechazo a las termoeléctricas, los pobladores iquiqueños aspiran a oponerse a estos proyectos mortíferos, por medio de herramientas legales y ciudadanas. Herramientas, todavía no utilizadas por el Municipio.
LA APROBACIÓN DE LAS TERMOELÉCTRICAS
Patache y Pacífico, son centrales que producirían 500 mega watts, invadirían 75 hectáreas de suelos y verterían mil toneladas por horas de agua caliente en el mar, en la región de Tarapacá.
El consejo municipal de Iquique concedió el 19 de abril pasado, la realización de un plebiscito para modificar el uso del suelo en el tramo Puerto Patillo y Punta Patache.
A pesar de esta aprobación votada por los concejales, la alcaldesa, Myrta Dubost, todavía no ha dado muestras hacia la organización del plebiscito ciudadano.
La votación al realizarse, tendría la categoría vinculante, obligando el municipio a considerar su resultado, al contrario de la consulta de 2009 en la cual el 97% de los votantes rechazaron las centrales.
El pasado día 6 de mayo, la Comisión de Evaluación Ambiental del Gobierno aprobó, con 11 votos a favor y una abstención, las termoeléctricas de Patache y Pacífico en la zona costera del sur de Iquique.
El Seremi (Secretario Regional Ministerial) de Obras Públicas de la Región de Tarapacá, Robinson Rivera Vicuña, justificó su voto: “Estudié ambos proyectos y voté en consciencia, creo que es una planta que cumple los estándares adecuados. [Estándares] que no tienen que ver, ni se acercan, a los que fueron aprobados con anterioridad en administraciones anteriores”, añadió.
El Seremi se refirió a estándares europeos que exigen el acopio de las cenizas, como el del carbón, en condiciones adecuadas, impidiendo así que aguas sucias puedan ser filtradas hacia el subsuelo.
No obstante, Joseph Morgan, director de Atacama Sustentable denuncia que “hoy día vemos como 11 personas que votaron son las que deciden sobre el futuro de nuestras ciudad sin considerar lo que opina la gente”.
Además, Morgan destacó que las primeras irregularidades vienen desde “el trámite ambiental de la institucionalidad anterior, la Corema (Comisión Regional del Medio Ambiente) que rechazó en noviembre pasado la iniciativa termoeléctrica, porque se consideró que había modificado el proyecto original, especialmente en los puntos de succión de agua en el sector de Patache para enfriar las maquinas”.
“Es muy fácil presentar cualquier cosa y en la medida de que uno está haciendo preguntas, uno va modificando las cosas” añadió el miembro de la ONG (Organización No Gubernamental) Atacama Sustentable.
MOVILIZACIÓN CIUDADANA ANTE CONTRADICCIONES OFICIALES
Arturo Neira, vicepresidente del comité, afirmó que “el municipio, y fundamentalmente la alcaldesa tiene un doble discurso, mientras decía a la prensa que estaba en contra de las termoeléctricas, estaba buscando todos los artilugios, las artimañas posibles para en definitiva permitir que se instalen”.
El miembro del consejo municipal, Guillermo Cejas, se sublevó explicando que “el consejo municipal por unanimidad de sus concejales aprobó un plebiscito y la alcaldesa lo ha ido prolongando y ya están aprobados dos centrales termoeléctricas y no podemos seguir esperando”.
Según el Codemat el Municipio no hizo uso de las herramientas a su disposición para rechazar el proyecto.
Además de la consulta ciudadana, el Municipio podía adoptar un Plano Regulador para impedir que se instalaran termoeléctricas a carbón en el territorio de la comuna. No obstante, el Municipio postergó la adopción de tal Plano hasta suspender el contrato con la empresa consultora que realizaba el estudio según el Codemat.
Los dirigentes también podían hacer uso del Artículo No117 de la Ley de Construcción y Urbanismo, que le hubiera permitido no otorgar “permisos de edificación” a las termoeléctricas, durante 90 días prorrogables hasta un año.
Morgan también subrayó las incoherencias gubernamentales: “Acá en el Norte de Chile cuando tenemos el desierto de Atacama con la energía procedente del sol más grande del mundo, ni siquiera tenemos un proyecto solar. El presidente Piñera el 21 de mayo del año pasado prometió de que de aquí al 2020 vamos a tener un 20% de energía renovables […] mientras tanto seguimos construyendo centrales termoeléctricas a carbón contaminantes”.
DECISIONES A COSTA DEL MEDIOAMBIENTE Y DE LA SALUD DE LOS POBLADORES
Sergio Cortez, presidente de Atacama Sustentable, denunció que la empresa Rio Seco S.A, es la responsable de los proyectos de las centrales. Morgan, por su parte, explicó que en Iquique ya existe una central termoeléctrica que funciona en la zona de Patache que: “ya está provocando daños en la población de Patache y Pacifico porque lamentablemente la chimenea y el botadero de ceniza quedan a metros de la costa donde el viento corre demasiado fuerte: Este carboncillo se desplaza justamente en dirección Norte donde están los centros poblados”.
El médico de la Universidad de Chile, Andrés Tchernitchin, destacó los efectos de la incineración del carbón sobre la salud. Según su calidad, el carbón emite hidrocarburos aromático poli cíclico, substancia que produce cáncer por una exposición larga, y por una exposición corta produce enfermedades broncopulmonares, e incluso puede afectar los procesos inmunológicos.
Las centrales también expulsan dióxido de azufre, cuya inhalación de partículas puede provocar problemas cardiovasculares hasta infarto al miocardio.
Techernitchin añadió que “ya ha ocurrido que centrales a carbón han comenzado usar petcoque [coque de petróleo] y eso significa liberación importante de dioxina, níquel, vanadio, plomo. Cada una de estas substancias tiene su efecto propio sobre la salud”.
Por Mélissa Quillier
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